Hoy tenía ganas de hacer un pastel salado y como tenía de ambos ingredientes me he decidido por este pastel fácil y digestivo.
Ingredientes:
2 huevos
800gr de pollo picado
250 gr de zanahorias
125 gr de queso fresco
una cebolla
especias a gusto
coñac
Es un pastel muy fácil de hacer. Pon a cocer las zanahorias peladas y troceadas. Mientras tanto pon a pochar la cebolla cortada muy pequeña. Cuando la cebolla esté casi terminada, caramelizala con un chorro de PX (le conferirá un sabor especial que le va perfecto a la cebolla y al pastel).
Cuando tengas las zanahorias cocidas, refrescalas un poco para que no te cuajen los huevos. Ponlas en un bol grande y junto con el queso fresco batelas con batidora hasta conseguir una crema. Añade los dos huevos enteros y sigue batiendo.
Una vez tengas una masa homogénea, añade el pollo picado. y la cebolla salteada y caramelizada (no la batas para encontrarte al comer el pastel, con trocitos de ella) . Añade un buen chorro de coñac. Tengo coñac macerado con trufa y para estos platos les confiere un aroma muy especial. Sala y especia a tu gusto. En mi caso he puesto: pimienta, canela, cominos y un buen pellizco de un conjunto de especias (hinojo, anis, jengibre, canela, y pimienta sichuan. Me parece una mezcla muy interesante. Se encuentran estos botes en supermercados orientales). Mezcla bien para que se integren todos los ingredientes.
Forra un molde de puding con papel vegetal. Vierte toda la mezcla en el molde.
Precalienta el horno a unos 210º y ponlo a una altura media sin gratinador durante unos 45 minutos (recuerda pinchar con un cuchillo limpio: si sale limpio es que está cuajado si sale con restos es que le falta cocción).
Coste: medio
Tiempo: hora y media incluyendo la coccicón
Dificultad: poquita
¡Bon profit!
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