viernes, 26 de diciembre de 2008

Quiche de espárragos

En la última compra en un gran supermercado, tuvieron a bien regalarme una especie de cesta de navidad (todo un detalle) con productos de comida. Entre esas cosas había un sobre de crema de espárragos. Confieso que no son muy de mi agrado las sopas o cremas pero decidí guardar este sobre por si se me ocurría un uso alternativo. Y de ahí la quiche que nos ocupa.

Ingredientes:
un sobre de crema de espárragos Knorr
2 huevos
4 lonchas de jamón serrano
1 cebolla
espárragos verdes al vapor (para decorar)
queso rallado
una cucharada de café de agar agar (4 gr)
un chorro de leche o nata


Para la masa:

un vaso de gaseosa
un vaso menos un dedo de aceite
una cucharada de bicarbonato (5 gr)
harina (la que admita, hasta que la masa se despegue con facilidad de tus dedos).






Corta la cebolla a trocitos pequeños y póchala a fuego lento con un poco de sal. Cuando esté bien pochada (caramelizada) añade el contenido del sobre de crema de espárragos. Deja que hierva junto unos minutos. Añade la cucharada de agar agar y remueve bien hasta que se disuelva. Añade el jamón serrano troceado muy pequeño y apaga el fuego. Reserva.





Ponte con la masa. Añade los líquidos y el bicarbonato y remueve. Comienza a añadir la harina despacio y deshaciendo bien los grumos que puedan montarse. Esto puedes hacerlo con una batidora o con una barilla. Cuando la masa se vuelva algo consistente, terminala a mano. Cuando notes que la masa se despega de tus dedos sin esfuerzo, ya la tienes al punto. Distribuyela por el molde que vayas a utilizar (no suele pegarse por la cantidad de aceite que lleva, así que no hace falta que prepares el molde. Si no te fías, puedes poner unas gotas de aceite y repartirlo por todo el molde con la ayuda de una servilleta de papel). Antes de rellenar tendrás que volver a subir la masa por los bordes del molde dado que tiende a encogerse.

En un bol pon los dos huevos enteros, el chorro de nata (o leche) pon algo de nuez moscada, una pizca de sal y bate con energía. Añade lo que has preparado en la sartén y remueve todo.

Vuelve a distribuir bien por los bordes la masa y puedes poner un poco del queso rallado en la base de la quiche. Rellenar con la mezcla que has batido (huevos, crema de espárragos etcétera) y decora con los espárragos que tienes hechos al vapor (puedes decorar con cualquier cosa que se te ocurra para dar un toque de color o nada en absoluto). Distribuye una generosa ración de queso rallado y al horno. Precalentado a 180º; con la parte de abajo encendida y poner la quiche en un lugar bajo. Cuando observes que está medio hecha (cuando pinchas el relleno, el pincho sale casi limpio) enciende la parte de arriba del horno para que tome color. Desmoldar cuando esté templada o fría.

Coste:
barato
Tiempo: prepararla una media hora. Hornearla una hora y cuarto aproximadamente
Dificultad: poca poca

¡Bon profit!

viernes, 19 de diciembre de 2008

Tagliolini con foie


Tenía un hígado de pato entero y una vez arreglado y puesto en buenas lonchas, me quedaron las puntas y recordé unos espaguetis tomados en Casa Pepa (Ondara -Alicante-) hechos con salsa de trufa blanca y trozos de hígado de pato que me inspiró para realizar esta receta, un poco más casera.



Ingredientes:
Tagliolini (dos raciones de pasta fresca)
30 gr de hígado de pato
aceite aromatizado a la trufa
sal




Pon en una olla agua a calentar. Cuando hierva añadir un puñado de sal e introduce la pasta (en este caso como es fresca necesitamos que el agua levante dos veces. A la segunda vez que se pone a bullir el agua, la pasta está al dente).
Una vez cocida la pasta, ponla en un escurridor y reservala. En la misma cazuela, poner un chorro generoso de buen aceite de oliva con aroma de trufa (en mi caso la trufa es de la zona de Morella y es negra pero es muy aromática y deliciosa de sabor) y añade el trozo de hígado de pato troceado a pedacitos pequeños. No dejar de mover porque no se debe dorar excesivamente el hígado, lo que se pretende es que suelte la grasa y que se amalgame junto con el aceite de trufa.
Cuando ya tengas una especie de aceite turbio, añade la pasta y remueve enérgicamente.
Puedes ponerle algo de color para adornar el plato, por ejemplo, perejil (pero poca cantidad para que no desvirtúe el sabor del plato) y si tienes mucho hígado también podrías ponerle una cortada recién hecha sobre la pasta (esta vez la cortada de foie debes hacerla con fuego fuerte para que dore su exterior pero quede apenas hecho su interior).



Coste: barato porque aunque sus ingredientes no son económicos (trufa y foie) se utiliza tan poca cantidad que no encarece el plato
Tiempo: unos 10 minutos (lo que cuesta hervir el agua)
Dificultad: ¿alguna?

¡A disfrutar!

sábado, 13 de diciembre de 2008

Anillas de calamar encebolladas



Plato bien fácil de preparar y que gusta mucho dado que puedes ponerlo como un entrante en frío o caliente o como plato fuerte acompañado de arroz blanco o pasta.


Ingredientes:
800gr de anillas de calamar limpias (puedes comprarlas congeladas)
3 cebollas grandes
3 hojas de laurel
granos de pimienta a gusto
pimentón dulce
aceite y sal


Corta las cebollas en juliana y recuerda que el volumen de anillas de calamar y el de cebolla cortada debe ser parejo, parecido (esa es una buena medida).
En una cazuela con buen fondo (de esas que permiten cocinar lento lento) pon un buen chorro de aceite. Introduce la cebolla y sálala. Pon también las anillas y vuelve a salar (no pongas grandes cantidades de sal...es preferible retocar al final de los guisos).
Agrega dos cucharadas generosas de pimentón dulce, unos granos de pimienta como 10 o 12) y las tres hojas de laurel. Tapa la cazuela y pon el fuego a la menor intensidad que se pueda. Deja que se haga lentamente durante unos 75 minutos. Al final puedes llegar a destapar la cazuela y subir el fuego si deseas que se evapore el exceso de caldo y para que la salsa espese algo.



Coste: barato
Tiempo: prepararlo menos de 15 minutos. Cocinarlo unos 75 minutos
Dificultad: ¿la tiene?

¡A disfrutar!

domingo, 7 de diciembre de 2008

Tarta de calabaza con sorpresa

Esta receta nace de la receta original de Falsarius (el 'pastelcuentos de calabaza') la cual realicé y francamente estaba bueno, bueno. Si a esto se le una la confusión un día de compras en el que compré un rollo de masa brisa (¿?) y no de hojaldre como era mi intención y dado el tiempo de crisis en el que vivimos, pues que no están los tiempos para tirar nada. Así que decidí hacer un 'mix' entre la receta de Falsarius y la de una quiche de calabaza con masa brisa. Y la ocurrencia no estuvo nada mal...pero nada nada mal.

Ingredientes:
Masa brisa
un brik de crema de calabaza (knorr de 500 ml)
2 cebollas
2 huevos
un brik de nata vegetal
queso rallado
anchoas
agar agar (una cucharada de café)

Cortar la cebolla en juliana o en trozos muy pequeños y poner a fuego mínimo. Ponle sal para que sude. Cuando esté casi hecha añadirle nuez moscada y especias al gusto (le he puesto hierbas provenzales porque me gusta mucho el sabor que aportan). Añadir el brik de calabaza y el de nata y remueve bien para que se mezclen los ingredientes. Añadir el agar agar, mueve bien y apaga el fuego (el agar agar es para espesar. Si no le pones esto ni las típicas hojas 'gelatinizantes' tendrás que aumentar la cantidad de huevos para que se cuaje todo este líquido, por ejemplo, 3 huevos y media tarrina de queso de untar).
En una fuente pon los dos huevos y junto a algo más de nuez moscada y de hierbas provenzales, batelos bien, con energía. Añade lo que que tienes reservado en la cazuela: la crema de calabaza junto a la cebolla pochada y la nata y remueve bien para que se mezclen todos los ingredientes.
Dispon la masa brisa sobre un molde y rellena con lo que terminas de mezclar.
Coloca las anchoas a gusto y espolvorea con queso rallado.
Introduce en el horno precalentado a 180º a media altura y sólo la parte de abajo

Coste: normal
Dificultad: no mucha, son muchos pasos pero todos sencillos
Tiempo: para la preparación sobre media hora. Al horno como hora y media (apago el horno y deja dentro hasta la hora de servirla). Fría está también deliciosa y recuerda que como no todos los hornos calientan igual, la forma de saber si un relleno de quiche está hecho (o cualquier pudding) es introducir una varilla en su interior y al sacarla que esta salga limpia, sin restos de ningún tipo. Y también recuerda que es mejor desmoldar cuando está tibia o fría, para que la masa no se rompa.

¡Bon profit!