Teníamos peras por encima de la cabeza y decidí hacer un postre utilizándolas. Las pera y el chocolate se llevan muy bien así que decidí mezclar estos dos ingredientes. Esta tarta queda muy aparente y es muy sencilla de hacer. Vamos a ello.
Ingredientes:
una hoja de hojaldre
tres o cuatro peras (dependiendo de tamaño)
chocolate negro rallado
un poco de harina
dos cucharadas de azúcar moreno
agua
huevo batido para pintar
Lo primero es pelar y filetear las peras. Cortalas no muy finas (de medio centímetro o así). También ralla el chocolate, es preferible utilizar chocolate de pastilla que en polvo (queda más buena).
Extiende el hojaldre y con un cuchillo realiza unos cortes en las partes externas (serán las piezas que al cruzarlas darán el aspecto de trenzado).
En el centro pon una base abundante de chocolate rallado y sobre ella coloca las peras. Hay que ser generosa al ponerlas, amontónalas pero sin hacer montaña con las peras. Una vez colocadas espolvorea un poco de harina, azúcar moreno y salpica con agua (si, no te dé miedo. Esto hará que entre los trozos de pera exista una cremita dulce que parecerá más pastel).
Ahora ve cerrando el pastel. Primero los extremos (para que no se salga el relleno) y luego ve cruzando una tira de la derecha y luego una de la izquierda. Repite esto hasta que se terminen las tiras que has cortado.
Pinta con abundante huevo batido y al horno. Este lo tendrás precalentado a 180º y dejala durante unos veinte minutos o hasta que esté el hojaldre bien crujiente y dorado.
Coste: barato
Tiempo: una hora
Dificultad: Una poquita, pero muy poquita
¡Bon profit!
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