Pappardelle fraudulentos de calabacín al pesto (receta baja en calorías)

¿Quien no echa de menos un plato de pasta bien salseado cuando está a dieta? Bien, para esos casos, esta receta es ideal. Vamos a sustituir la pasta por verdura y prometo que el resultado es delicioso: fresco, gustoso y muy agradable de tomar. Esta receta se la debo a una buena amiga que en los últimos tiempos se ha convertido en vegetariana por lo que la creatividad en el cocinado de las verduras y los cereales, está garantizada. Gracias Xelo. Seguiré pidiendote que me pases recetas. Buena idea ¿verdad?

 

Ingredientes: 

Salsa pesto

Calabacines

Prepara la salta pesto como lo indico en una receta anterior. 

Pela el calabacín con un pelapatatas. Lavalo bien y comienza a hacer tiras de calabacín con el mismo pelapatatas. No utilices la parte central del calabacín porque encontrar pepitas en el plato, no es muy agradable. Puedes conservar esta parte central para hacer una crema de calabacín (al triturar no molestarán las pepitas del calabacín).

Una vez hechas todas las tiras, ponles la salsa pesto y deja macerar en la nevera durante un par de horas (se necesita que los sabores se mezclen). Y ya lo tienes. Prometo que te va a sorprender gratamente.

Coste: barato

Tiempo: 10 minutos y dos horas de maceración

Dificultad: mmmmmm

¡Bon profit!

(Casi) Salsa pesto (receta baja en calorías)

El pesto es una salsa deliciosa y muy refrescante, muy de verano. He intentado quitarle calorías a la receta original (ya sabes que queso y piñones contienen muchas calorías). Hice una prueba y bien, no es pesto del todo, pero si pasa por casi pesto.

Ingredientes:

2 dientes de ajo

albahaca fresca

piñones

sal y aceite de oliva

Limpia y corta la albahaca. En mi caso ese día no encontré en el mercado albahaca fresca así que preparé la salsa con esos paquetitos de hierbas frescas ya cortadas y puestas en aceite. Necesité dos de estos paquetitos.

En un mortero añade los dientes de ajo pelados y cortados muy pero que muy pequeños. Añade un pizquito de sal y los piñones y comienza a machacar todo junto. Dado que la albahaca ya la tengo triturada no la he añadido hasta el final del proceso. Si fuera fresca, debería incorporarla en el mortero e ir machacando todo junto.

Habrás comprobado que he eliminado el queso parmesano de la receta. Puedes añadirlo si quieres tener una salsa pesto real. Al querer quitarle calorías a la receta, he decidido quitar el queso y no los piñones. El resultado es bastante correcto.

Añade el aceite de oliva. Remueve y ya tienes una casi salsa pesto.

Coste: barato

Tiempo: 15 minutos

Dificultad: ¿alguna?

¡Bon profit!

Arroz con bacalao y coliflor

Este arroz me encanta. La he aprendido de mi madre. De hecho lo hicimos el fin de semana pasado, en su casa, entre las dos pero olvidé la cámara de fotos. Así que tuve que repetir el plato para sacarle las fotos y poder colgar la receta (no, no me supuso ningún esfuerzo. Está delicioso).

Ingredientes:

Coliflor

bacalao salado seco

bacalao desalado crudo

arroz (lo he mezclado: redondo y largo)

un tomate rallado

ajo

pimentón dulce, sal, aceite y colorante alimentario

Lavar y trocear la coliflor. Cortar un par de ajos muy pequeño y poner a sofreír con un buen chorro de aceite de oliva. Verter la coliflor cortada menuda. Añadir algo de sal (no mucha, recuerda que el bacalao es salado) y pimentón dulce. Poner a fuego muy suave y dejar que rehogue bien. Reservar una vez terminada. Puedes poner un poco de cominos cuando pongas el pimentón para evitar que sea tan indigesta.

Desmenuzar el bacalao salado y seco y ponlo a remojo para quitarle el exceso de sal. Una vez lo tengas a buen sabor, escurre el exceso de agua y reserva. Corta en dados el bacalao desalado crudo. 

Corta otro ajo menudo y pongo a sofreír en un buen chorro de aceite de oliva.  Ralla un tomate. Añade el bacalao seco y crudo y rehoga junto al ajo una vez este esté algo dorado. una vez el bacalao haya soltado algo de caldo añade el tomate y remueve. Añade la coliflor rehogada. Ponle un buen puñado de pimentón dulce.

Mide el arroz. En mi caso he puesto 200gr mezclado arroz redondo y largo (lo mezclo para que el arroz quede más suelto. Además si sobra, al añadirle el arroz largo, no se pasa si lo recalientas. Con el arroz redondo solo esto no se puede hacer). Mide el agua: dos y media medidas por una de arroz y calienta hasta llevar al hervor.

Añade a la olla el arroz y sofríe todos los ingredientes. Añade el agua hirviendo. Pon un poco de colorante alimentario (si deseas que el arroz esté amarillo). Cuando comience a hervir, prueba de sal. Si le falta es el momento de añadirla (no debes añadir antes dado que el bacalao va a dejar un sabor fuerte a sal). Deja hervir a fuego fuertecillo durante unos 17 minutos. Si ves que este tiempo no se ha cumplido y ya no queda nada de caldo, puedes añadir algo más de agua hirviendo (una poquita) o, mejor, tapar la olla para conseguir que no evapore nada de nada.

Coste: barato

Tiempo: 40 minutos

Dificultad: mmmmmmmm

¡Bon profit!

Shepherd's pie

Esta es una receta de la cocina anglosajona que me ha pasado mi hermana. Es de las recetas que vale la pena hacer. Es un pastel sabroso y que constituye un plato completo, con todos los nutrientes necesarios.

Ingredientes:

300gr de carne picada mixta (ternera y cerdo)

2 zanahorias

1 cebolla

2 puerros

guisantes (en mi caso, un bote)

salsa Lea Perrins

un botellín de cerveza negra

Para el puré: dos patatas, leche, un poco de mantequilla

Queso rallado

Limpiar y trocear todos los ingredientes. Ponerlos en una olla precalentada con un chorro de aceite poniendo primero la cebolla, los puerros y las zanahorias. Añadir la carne y desmenuzar, impidiendo que queden grumos. Salpimentar todo el conjunto. Poner un chorro de salsa Perrins. Añade los guisantes bien escurridos (si son de bote como los mios).

Sin dejar que se cocinen todos los ingredientes, añade todo el botellín de cerveza. Baja el fuego, tapa la olla y deja que todo se cocine lentamente.

Mientras tanto habrás cocido las patatas a trozos grandes. Sácalas del agua y pisalas con un tenedor. Añade un chorro de leche y una nuez de mantequilla. Añade también, si lo requiere, un poco de sal y una pizca de nuez moscada. Tienes que conseguir un puré de patatas muy cremoso. Si lo necesitas, pásalo por un pasapuré para que quede cremoso.

Cuando el guiso lleve cerca de 40 minutos, estará hecho (o le faltará poco). Observalo bien. Debe haberse consumido todo el líquido y haberse convertido en una salsa espesa. Prueba de sal.

Pon unos moldes que puedas introducir en el horno (precalentado a 200º) y dispón el guiso de la cazuela y cubre con abundante puré de patatas. Ponle queso rallado por encima y gratina durante unos 10 minutos (no lo dejes mucho para que no se queme.

Coste: barato

Tiempo: una hora y media

Dificultad: mmmmmmm

¡Bon profit!

Bombones de sandía (receta baja en calorías)

Una vez más confieso que algo que me vuelve tremendamente creativa y que aumenta mis ganas de estar en la cocina es tener algo que realmente tengo que hacer, una obligación, de las que no me gustan. Estos bombones son el resultado de uno de esos momentos. La sandía es una fruta llena de sabor y agua y pensé, dado que la utilizo en muchos platos de verano y dietéticos, por qué no darle otra textura. Estos bombones son muy fáciles de hacer y seguro divierten tus platos y a tus comensales.

Ingredientes:

Sandía sin pepitas

agar agar (una cucharada de café, aunque depende de la cantidad de sandía)

utensilios: una jeringuilla, unos moldes de bombones

Lo primero es quitar las pepitas de la sandía, aunque ahora hay una sandía con unas pepitas blandas que se pueden comer sin problemas o triturar sin que queden molestos trocitos duros. Una vez sin pepitas, tritura la sandía con una batidora. 

Pon un cazo al fuego y calienta el jugo de la sandía, no dejes que hierva. Vierte la cucharada de agar agar y remueve para deshacerlo bien. No dejes que llegue a hervir, cuando 'humee' el líquido, retira del fuego.

Con rapidez para que no espese demasiado y te sea más difícil, rellena los moldes. La jeringuilla es porque los moldes de bombones son muy pequeños y así no hay problema de no verter bien el líquido de sandía. Deja enfriar y ponlos en el refrigerador sin desmoldar. Utilizalos para decorar platos o para darle una nueva forma a tus frutas. Piensa que esto se puede hacer con cualquier fruta: si la fruta tiene mucha fibra o es densa (con poca agua) deberás, mejor, licuar la fruta, más que triturarla con batidora.

Coste: barato

Tiempo: menos de 15 minutos

Dificultad: ¿difícil?

¡Bon profit!

Ensalada de pasta con pepino y salsa de yogur (receta baja en calorías)

Hoy vamos a realizar una fresca y gustosa ensalada de pasta junto con la ensalada griega llamada salsiki pero sin complicarnos.

Ingredientes:

Pasta  de grano duro (para ensaladas)

un yogur blanco natural (sin edulcorar)

un pepino pequeño

un poco de perejil

sal

Pon una cazuela con abundante agua para hervir la pasta. Recuerda dejarla al dente. Una vez esté cocida, refrescala para que puedas agregarle la salsa sin que el yogur corra peligro por estar tibia.

Limpia y pela bien el pepino. Mezcla en un bol el yogur con un toque de sal y el perejil cortado muy pequeño (he recurrido a los estuchitos que venden en los supermercados en la sección de ensaladas para no entretenerme. También se podría poner cilantro o albahaca. Elige la hierba fresca que más te guste). Batir bien para que se mezclen los ingrecinetes. Corta el pepino en pequeños trozos e introducelos en el yogur con perejil. 

Dispon la pasta cocida y refrescada con un poco de esta salsa de pepino y yogur y mueve para impregnar toda la pasta con la salsa. Puedes distribuir algo más de salsa por encima de cada plato.

Coste: barato

Tiempo: los minutos que cuesta hervir la pasta

Dificultad: ¿ves alguna?

¡A disfrutar!

(Casi) Tortilla de patatas con ajetes (receta baja en calorías)

Uno de los platos que se echan de menos cuando se inicia una dieta de adelgazamiento es, cómo no, la tortilla de patatas. Viajando por la red, me encontré un artilugio (uno más) que prometía mucho, cocinar al vapor en el microondas: estuche de vapor Lékué. Me puse manos la la obra, lo adquirí y lo probé. 

Este es uno de los resultados: tortilla de patatas. Confieso que le puse ajetes porque no sabía cómo iba a resultar y preferí ponerle algún ingrediente que tuviera sabor para así garantizarme una tortilla con sabor (dado que no iba a freir nada y el vapor no suele aportar sabor). El resultado no me decepcionó. No es una tortilla de patatas al uso, pero cubre, y con creces, el tomar buenas tortillas con mínimo consumo de aceite.

Ingredientes:

Unas rebanadas de patatas muy finas

unos ajetes

dos huevos

unas gotas de aceite

sal

Pela la patata y haz unas lascas finas de patata. Añade unos ajetes y unas gotas de aceite. Puedes poner una pizca de sal.

Pon todo esto dentro del estuche de vapor Lékué (conste que no me han regalado el artilugio pero animo a adquirirlo) y ponlo en el micro a potencia máxima durente unos minutos (esto depende de la cantidad de patatas que pongas. Es mejor que empieces por 5 minutos y vayas aumentando el tiempo de medio minuto en medio minuto. Sabes que en el micro el tiempo es importante).

Casca los huevos y bátelos poco, no como si fuera para tortilla sino menos. Una vez las patatas estén, retira el estuche de vapor, abrelo con cuidado (este vapor que suelta quema mucho) y añade los huevos semibatidos. Impregna bien las patatas.

Vuelve a cerrar el estuche y ponlo en el micro un minuto (si te gusta algo jugosa la tortilla, algo más de tiempo si te gusta muy cuajada) y ¡ya está! Una casi tortilla de patatas con ajetes.

Coste: barato

Tiempo: menos de 15 minutos

Dificultad: mmmmmm

¡Bom profit!